Esta receta, fácil de hacer, se puede comer fría o caliente. Es ideal tanto para comidas especiales como para llevar en fiambrera. Y gracias a la berenjena, rica en potasio, podemos mejorar nuestra presión arterial.
2 berenjenas.
2 pechugas de pollo enteras.
1 naranja grande o 2 pequeñas muy jugosas.
1 limón.
Pimentón dulce.
Vinagre de Módena.
Salsa de soja.
Una pizca de pimienta negra.
Aceite de oliva
PREPARACIÓN
En una bandeja ponemos en adobo las pechugas de pollo con el jugo de las naranjas, un poco de pimienta negra y un chorrito de salsa de soja (no hay que salar la carne porque la soja ya es salada) y las dejamos en la nevera un par de horas macerando.
Mientras. podemos preparar la mousse y para ello cortamos las berenjenas por la mitad y sin pelar, las ponemos en una plancha del lado de la pulpa hasta que se dore. Luego les damos la vuelta y dejamos que se vayan cociendo. De vez en cuando añadimos sal, aceite y pimentón dulce. Cuando observamos que la parte carnosa está cocida la retiramos del fuego, vaciamos con una cuchara la parte interior de la cavidad y la ponemos en un bol. Añadimos más pimentón, un punto de sal (al gusto), y mientras vamos pasando la batidora (también se puede hacer con thermomix) vamos añadiendo aceite de la misma forma que como cuando hacemos mayonesa. Debemos conseguir una textura muy suave. También puede añadir hierbas al gusto (comino y/o ajo y/o perejil y/o hierbas de Provenza) siempre que no domine el sabor, es mejor ir probando hasta conseguir una textura y sabor apropiados.
Calentamos el horno a 180 º e introducimos la bandeja con las pechugas que quedarán cocidas entre los 20 y 40 minutos, dependiendo del grosor de la carne. Durante el tiempo de cocción iremos rociando el pollo con su propio jugo y de vez en cuando le daremos la vuelta para que los dos lados queden bien doraditos. Finalmente será necesario un toque de grill para acabarlas de asar.
La mousse de berenjena se sirve de acompañamiento del pollo pero también se puede comer sola con tostaditas. ¡Está buenísima! Ah, y si desea llevar el pollo con la fiambrera, es más práctico cortarlo en rodajas.